Hoy implemento una nueva sección que se me acaba de ocurrir. Voy a recordar junto a ustedes los libros que leí antes de crear este blog, incluso algunos que leí en mi infancia.
Voy a empezar con el primer libro de más de 50 páginas que leí cuando estaba en la escuela primaria, un libro que leí con mi mente de niña y que se quedó grabado en mi memoria. No lo he vuelto a leer y tal vez sea porque no quiero perder la visión infantil que tengo de él.
El libro llegó a mis manos gracias a mi papá, pertenecía a la biblioteca de su infancia. Es una edición con tapa dura del año 1963, de la Editorial Mateu, perteneciente a la colección Juvenil Cadete. Sus páginas están amarillas y su olor es antiguo y al tenerlo entre mis manos siento que es un tesoro salido de un arcón de la casa de mis abuelos.
No encontré en Internet una foto de la misma edición que tengo, así que le saqué una foto para que vean lo linda y colorida que es la tapa.
"EL PRINCIPE Y EL MENDIGO" de Mark Twain
Les transcribo la sinopsis de la contratapa de esta edición que ya tiene cincuenta años :-)
"Asistimos a través de esta historia a una acción verdaderamente divertida y aleccionadora.
Un pillete de Londres, hijo de un padre desnaturalizado que le muele a golpes, recibe a escondidas de éste una educación esmerada gracias a la intervención de un clérigo. El parecido de este pillete con el hijo del rey de Inglaterra es enorme, y un día en que por ciertas circunstancias curiosísimas el pilluelo es introducido en palacio y cambia sus harapientos vestidos por las reales vestiduras del heredero de la corona, es confundido con el príncipe verdadero, que a su vez es tomado por mendigo y arrojado de palacio.
Tanto el pillete en su papel de príncipe como el príncipe en el papel de pillete corren aventuras interesantísimas y divertidas, que después de muchos lances culminan en la proclamación del príncipe verdadero como rey, a la muerte del soberano reinante, y la protección real del nuevo rey para el pilluelo y otras personas que el príncipe había tratado y conocido durante su vida de vagabundo."
Una reseña muy curiosa, que utiliza ciertas palabras que hoy día no vemos en las contratapas de los libros.
A pesar de que hace más de veinte años que disfruté de las páginas de la historia de Tom Canty y el príncipe Eduardo, aún puedo evocar las imágenes que vislumbré en ese momento. Es increíble como un libro queda grabado en nuestra memoria y en nuestro corazón, ¿les ha pasado a ustedes algo parecido? Seguramente hayan leído "El príncipe y el mendigo" y tengan una opinión y un recuerdo de él que sólo ustedes pueden atesorar, o tal vez no haya dejado huellas...
Para despedirme, les dejo unas líneas del comienzo del primer capitulo...
"En la ciudad de Londres, un día de otoño del segundo cuarto del siglo XVI, nació un niño en el hogar de una familia pobre, apellidada Canty, que no lo deseaba. El mismo día nació otro niño inglés en una familia acaudalada conocida con el nombre de Tudor, que lo deseaba. Y no lo esperaba con menos anhelo toda Inglaterra. La Gran Bretaña lo había ansiado y con tantos deseos se lo habían pedido a Dios durante largo tiempo, que, al ver realizada su más cara ilusión, el pueblo se volvió medio loco de alegría..."
Saludos a todos.
Dolly Gerasol